Eduardo Ocón y Rivas (1833-1901), gran compositor y pianista malagueño, en concreto Benamocarra. Proveniente de una familia humilde comenzó su carrera musical en la Catedral de Málaga, con gran interés y motivación por la música creó una escuela de música, para finalmente convertirse en el primer director del Conservatorio de Málaga y así convertirse en uno de los compositores españoles más importantes del siglo XIX.
¿Cuáles son los orígenes de Eduardo Ocón?
Nace en la Calle Pilar el 12 de enero del año 1833 en Benamocarra, pueblo de la Axarquía malagueña. Proviene de una familia humilde, su padre Francisco Ocón López era cerrajero, y su madre María de los Dolores Rivas Román cuidaba de los cinco hermanos, Eduardo era el tercer hermano. El pintor de la escuela malagueña Emilio Ocón y Rivas es hermano suyo.
¿Cuándo comenzó su interés por la música?
Desde muy jovén se interesó por la música, con tan solo siete años comienza su carrera en la Catedral de Málaga teniendo como profesor el maestro de capilla Mariano Reig que le instruye en solfeo, fuga, contrapunto, y composición, y finalmente piano gracias al organista José Joaquín Murguía. En el año 1848 es nombrado ministro de coro y dos años después a los diecisiete años ya impartía clases cuando se ausentaba el maestro. A sus 21 años en 1854 consigue mediante oposición la plaza de segundo organista de la Catedral de Málaga.
¿En que momento Eduardo hace un giro es su carrera musical profesional?
En el año 1967 con 34 años comienza a viajar por Europa tal vez porque Málaga limitaba a desarrollar sus habilidades musicales y completar su formación. Durante sus viajes conoce a grandes compositores como el belga François-Joseph Fétis, a los franceses Ambroise Thomas y Charles François Gounod. Durante su estancia en Francia consiguió mediante oposición una plaza como profesor de canto en las escuelas comunales de la capital francesa
La vuelta a Málaga
En el año 1870 vuelve a Málaga para ocupar de nuevo el puesto de segundo organista en la catedral por un salario bastante bajo por lo que poco después dimitió de este puesto. En 1869 se había creado la Sociedad Filarmónica donde asume la dirección y promueve la creación de una escuela de música donde imparte en el año 1871 clases se violín y de solfeo, finalmente diez años después en 1880 esta ambición le consiguió ser el primer director del Real Conservatorio «María Cristina» de Málaga, en honor a la Reina. El conservatorio se ubica en el antiguo convento franciscano de San Luis el Real hasta el año 2009.
Conocerá en Málaga a los Bochardt Odendahl, una familia alemana. En este momento conoce a la hija de la familia llamada Josefa Zela Willermine, una notable pianista, con la que acabaría contrayendo matrimonio con quien tendrá tres hijos: Ida, Eduardo y Cecilio.
¿Cuáles son las obras destacas por las que se conoce Eduardo Ocón?
– Motete al Santísimo (1854)
– Motete en Honor de la Inmaculada Concepción de María (1856)
– Quam Pulchri Sunt (1856)
– Cantata, compuesta en 1857 con motivo del nacimiento de Alfonso XIII y
– La zarzuela: El grito español, en colaboración con el dramaturgo Ramón Franquelo
– El Miserere, es una obra religiosa
– La Rapsodia andaluza
– Bolero Recuerdos a Andalucía Op. 8 (1868)
Sus últimos momentos y homenajes póstumos
Eduardo con 68 años sufre una pulmonía gripal de la cual fallece el 28 de febrero de 1901. Eduardo Ocón sin duda ha dejado huella en Málaga y en su honor se construyó en el año 1960 un auditorio que lleva su nombre en el parque junto al Paseo del Parque. Cerca de este recinto se ha levantado en 1961 un busto sobre un pedestal con la imagen de Eduardo cuyo autor es Domingo Muguerza. Tanto en la barriada malagueña Huelín como en su pueblo natal Benamocarra hay un centro educativo que lleva su nombre. Finalmente en Benamocarra se celebra en septiembre el día de la música en honor al compositor malagueño.
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